Hay un tema que rara vez toma protagonismo en este blog, en gran medida por el desinterés personal o porque no se ve abordado en los libros que llegan al librero: la vejez. Por esto estoy feliz de que “Dar las gracias no es suficiente” (Nitro Press, 2019) de Carlos Bortoni haya llegado a mis manos por conducto de su autor.
En “Dar las gracias nunca es suficiente” se aborda un tema
complejo, el trabajo de las personas de la tercera edad como empacadores en los
supermercados, que aunque temporalmente pareciera no venir a cuento, pues
estamos en medio de una pandemia, es una realidad que refleja el nivel de
desigualdad y la deficiencia del sistema de pensiones en México.
El protagonista, el Sr González, es uno de tantos ancianos
que son colocados por algún instituto gubernamental para que genere un ingreso
empacando las compras de la clientela de un supermercado. González es un hombre
artrítico que ha aprendido que las propinas se vuelven más generosas cuando más
lástima causa. Muestra sus manos deformes, hace gala de torpeza, es deliberadamente
ineficiente para darles a los consumidores ese espectáculo que los ayuda a
sentirse mejor consigo mismos por cada moneda o billete que le dan al viejo.
A lo largo de los días en los que se desarrolla la trama
conoceremos las molestias que aquejan a González, a los otros recomendados del
instituto con los que hay cierto recelo, a los “cerillos” (niños empacadores)
con los que se ve obligado a competir por las propinas en total desconfianza,
conoceremos a la empresa y a sus empleados y, sobre todo, la psique del
consumidor del espectáculo de la pauperización de los ancianos que se ven en la
necesidad de trabajar, aunque no sean empleados de planta, no gocen de sueldo,
ni de prestaciones, pero con el visto bueno de autoridades y empresarios.
Esta no es una novela condescendiente con el lector, es un
texto que habla de abandono, de pobreza, de enfermedad, de indolencia y
decadencia. Es una historia fuerte y tiene un giro final que sorprende, que nos
hace sentir una opresión en el pecho. Porque si bien nuestro protagonista sería
la víctima por definición, Bortoni; voluntariamente o no, nos hace cuestionarnos si en realidad lo es.
Si quieres hacerte de tu ejemplar, se encuentra disponible
en algunas librerías de prestigio o bien sigue las redes de Nitro Press para
encontrar los puntos de venta.
Platicamos con Carlos para el canal de YouTube:
Sobre el autor
Carlos Bortoni (Ciudad de México, 1979), estudió historia en
la ENAH. Es autor del libro cuentos “El imperio soy yo” (Nula, 2001), de la
novela “Perro viejo y cansado” (Nitro Press, 2014) y del compilado de narrativa
breve “Tormentas en vasos de agua” (Abismos, 2014). Ha colaborado con
diferentes publicaciones, textos suyos han sido incluidos en antologías como “Cuentos
de barbarie” (Navarra, 2016) o “Lados B: narrativas de alto riesgo 2016:
hombres” (Nitro Press).
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